Los riesgos a los que está sometido un Soldador son tanto los que pueden surgir durante la transformación del producto que se realiza en el taller como en su colocación en la obra:
o Quemaduras por contacto con el soplador, el soldador, etc., cuando estos elementos están sometidos a altas temperaturas, expulsan chispas, etc.
o Radiaciones ionizantes por la exposición a la soldadura eléctrica.
o Tropezar o pisar herramientas o materiales situados en zonas de paso.
o Caída de las herramientas cuando se están utilizando.
o Caída del material durante el transporte.
o Golpes contra objetos fijos.
o Golpes con herramientas en las manos cuando se están utilizando.
o Golpes y cortes con maquinaria en las manos y los pies.
o Quedar atrapado entre perfiles de aluminio, acero, etc. o al caer material de una estantería.
o Sobreesfuerzos diversos debido a cargar exceso de peso o por adoptar malas posturas de manera continuada y repetitiva.
o Contactos eléctricos indirectos por un aislamiento defectuoso.
o Ingestión de sustancias nocivas por falta de higiene, ocasionalmente por manos sucias.
o Inhalación de vapores tóxicos de plomo.
o Contacto con productos de limpieza de las máquinas que sean abrasivos.
o Ruido provocado por herramientas de corte y soldadura en el taller.
Fuente: Blogconstrumatica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario